A mi lo que me sorprende es que el metro-sexual alcalde haya salido a las calles de esta ciudad Heróica de Nogales. En este rinconcito del mundo, ubicado al noroeste del estado de Sonora, hoy tristemente conocida a nivel nacional como "Drogales", pocas ya son las esperanzas de que la situación actual cambie algún día por la gracia y providencia de un buen alcalde que los navojoenses hemos esperado por años, según mi abuelo, los últimos 60 años.
La sorpresa es que el actual alcalde Jesús A. Pujol Irastorza, haya dejado sus cómodos aposentos en Estados Unidos para bajar a estas humildes y estériles tierras sin nada que ofrecer, a darnos mensajes de ánimo y aliento, además a entregarnos unas riquísimas sandias donadas para 12 mil familias, es decir, una sandía por familia como despensa para ayudar al pueblo agüantador de Nogales que ha sobrevivido a tanto saqueador y vividor del sistema, que han pasado por aquí. Un pueblo que no pide por comida, sino por oportunidades, acciones ejecutivas concretas que lleven a Nogales a la prosperidad.
Y es que éste auténtico principe de Disney, no ha podido escuchar la 'vox populi', mucho menos la ´vox Dei' por atender importantes asuntos del futuro o del pasado. Mi consejo para este hotelero alcalde, que por cada sandía dicen gastó en 50 fotos, 3 entrevistas, 2 notas de periódico, 20 menciones en radio, 2 tweets y 10 'cacaraqueos de Comunicación y desarrollo social' son:
- Primero: Conozca la historia popular de esta ciudad, que la conozca. Sabiéndose su historia entenderá sobre lo que está parado y pide o necesita esta sociedad.
- Segundo: un príncipe no debe, ni puede gobernar un reino a distancia remota.
- Tercero: Aún tiene la oportunidad de pasar a la historia como un alcalde valiente y no solo como #LordSandias.
Solo tiene que dejar de verse tanto tiempo frente al espejo, ser valiente y, si no plantarle cara al crimen organizado, por lo menos coordinarse con su propia corporación municipal para acabar con la corrupción interna y terminar con la terrible dupla policía-ladrón que nos pone a temblar.
Déjese de amar así mismo, un poquito nomas, y ese poquito ame más a ésta tierra para vivirla sin miedo a la muerte, porque eso es saber vivir. Salga más a a la calle, camine, que le pegue el sol en la cara, y vuélvase un plebeyo como todos nosotros. Lo queremos ver.
Compita contra otras alcaldías del estado por materializar el atractivo discurso progresista de la transformación. ¡Pero hay que competir! Aproveche la oportunidad, porque teniendo en contra a tanto edil imbécil en el estado, difícil será su derrota.
Además, usted no oculta y acepta gustoso la filia de hacer caravana con sombrero ajeno, que es lo mismo que 'pararse el cuello', pues en estos tiempos es mejor ver las pocas cosas buenas. ¿Acaso no es un punto a su favor? Informar que las dádivas son causa de la donación de entidades privadas, por lo tanto tenga usted a bien saber qué es lo que aquí se le agradece.
Y aprovechando, le pedimos que con la misma honestidad transparente el destino o fin que le dará al dinero recolectado de las onerosas multas que, como medida de contención han fracasado, pero han sido un éxito para las arcas del ayuntamiento, so pretexto de mantener por salud a las personas encerradas en dentro de sus pobres chozas.
Además sepa, alcalde, el riesgo que corría con la aglomeración de nogalenses en condiciones de vulnerabilidad que tienden, y en automático, a odiar a todo lo que tenga que ver con política y políticos. Bien puedo recibir una sandiazo en su cabeza, decorándola con algo parecido a un casco militar.
Y aunque la mayoría diga que lo de las sandías fue un acto de estupidez, yo creo que fue más la valentía que la posible y pueril inconsciencia de alguien que vive en un reino imaginario propio de Robin Hood o del principe encantador.
Yo sí le agradezco este noble gesto. Pues, repito, es de inteligentes ver lo bueno dentro de lo malo. Ademas, lo que debemos saber los nogalenses es que la sandia es el alimento perfecto, ¡el alimento del futuro! Puedes comerla en rebanadas, cuadritos, freírla, empanizarla, ahumarla, en brochetas, en una ensalada, con chilito, con limón, hacer agua fresca, hacer paletas, nieve, etc.
*Rubén Topete Anaya es reportero y colaborador del medio en Nogales, Sonora.
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